En primer lugar hemos visitado las cuevas
de Mendukilo en el concejo de Astiz en Lekunberri. Ha sido utilizada
como establo de montaña durante siglos, pero a partir del verano de 2005 está acondicionada
para recibir visitantes. La cueva tiene una pasarela flotante e iluminación
dinámica. La visita ha durado una hora y hemos visto varias salas como Artzainzulo
(refugio de pastores) donde llega luz natural, Hartz-zuloa (osera) y Laminosin
(sala de los lagos). El mayor atractivo de esta sala es la gran cantidad y
variedad de formaciones geológicas que posee: estalactitas, estalagmitas,
gourgs...
En su interior apreciamos el valor del
retablo románico, obra cumbre de la esmaltería europea. Allí, el guía que nos acompañaba,
nos contó la leyenda del dragón y
Teodosio de Goñi, del pasado carolingio y de los tiempos de los dólmenes,
que hoy aparecen diseminados entre campas y preciosos bosques de hayas.
1 comentario:
Interesante, la verdad es que hay auténticos tesoros donde menos te lo esperas. Las cueva de Arrikrutz también son una buena opción para una visita. A mi me encantó. :D
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