En el pueblo de Murueta se encuentra ubicado el molino de marea de Mallukitza. Para acceder al molino llegaremos a la iglesia de Santa María de Murueta. El camino vecinal hacia la izquierda de la iglesia nos llevará hasta el borde de la marisma donde se encuentra el Molino de mareas de Mallukitza.
Durante el siglo XVIII la marisma de Urdaibai era mucho más extensa que en la actualidad. Por las inmediaciones del molino discurría una ría lateral a la del Oka. Un largo dique cruzaba el estuario permitiendo embalsar las aguas en pleamar.
Con la llegada del ferrocarril a finales del siglo XIX y la canalización de la ría a principios del XX, gran parte de la marisma fue rellenada y roturada. El molino de Mallukitza fue cerrado en 1893 al quedar aislado de las mareas por el trazado de las vías. El canal que abastecía el molino es hoy un pequeño arroyo, pero en días de lluvia intensa, sus aguas crecen anegándolo todo como antaño.
Este molino estaba diseñado para aprovechar el flujo y reflujo de las mareas como fuerza motriz. El dintel de su puerta conserva la inscripción "Viva Jesús y el dulce nombre de María santísima. Año de 1796". Sin embargo su construcción debió comenzar unas décadas antes porque hay documentos de su existencia desde 1747.
Los molinos de mareas se construían en los cauces de las rías, entre largos diques con compuertas. Éstas permanecían abiertas mientras la marea ascendía, período en el que el molino no podía funcionar. Tras la pleamar se cerraban las compuertas, y tan pronto el descenso de la marea dejaba al descubierto las ruedas del molino, se abrían los desagües interiores para que el agua a presión las pusiera en movimiento. El molinero disponía entonces de varias horas para efectuar la molienda.
La construcción de este molino coincide con una época de auge de la actividad molinera, favorecida por la introducción del maíz americano.
El molino de Mallukitza fue acondicionado para moler el caolín de la comarca con que se abasteció la cercana fábrica de San Mamés, en Busturia. Esta factoría se mantuvo en activa entre 1842 y 1862, dedicada a la fabricación de loza de estilo inglés y cerámica tipo Talavera.
Volviendo al camino vecinal, nos dirigimos al barrio de Goierria, que atravesándolo entre antiguos caseríos desembocaremos en el entorno del apeadero del tren, donde existen varios elementos de interés: unos rústicos embarcaderos de madera y junto a ellos, la antigua fábrica de tejas de Murueta de la que se mantiene su chimenea, ahora en restauración, y parte de la estructura.
Durante el siglo XVIII la marisma de Urdaibai era mucho más extensa que en la actualidad. Por las inmediaciones del molino discurría una ría lateral a la del Oka. Un largo dique cruzaba el estuario permitiendo embalsar las aguas en pleamar.
Con la llegada del ferrocarril a finales del siglo XIX y la canalización de la ría a principios del XX, gran parte de la marisma fue rellenada y roturada. El molino de Mallukitza fue cerrado en 1893 al quedar aislado de las mareas por el trazado de las vías. El canal que abastecía el molino es hoy un pequeño arroyo, pero en días de lluvia intensa, sus aguas crecen anegándolo todo como antaño.
Este molino estaba diseñado para aprovechar el flujo y reflujo de las mareas como fuerza motriz. El dintel de su puerta conserva la inscripción "Viva Jesús y el dulce nombre de María santísima. Año de 1796". Sin embargo su construcción debió comenzar unas décadas antes porque hay documentos de su existencia desde 1747.
Los molinos de mareas se construían en los cauces de las rías, entre largos diques con compuertas. Éstas permanecían abiertas mientras la marea ascendía, período en el que el molino no podía funcionar. Tras la pleamar se cerraban las compuertas, y tan pronto el descenso de la marea dejaba al descubierto las ruedas del molino, se abrían los desagües interiores para que el agua a presión las pusiera en movimiento. El molinero disponía entonces de varias horas para efectuar la molienda.
La construcción de este molino coincide con una época de auge de la actividad molinera, favorecida por la introducción del maíz americano.
El molino de Mallukitza fue acondicionado para moler el caolín de la comarca con que se abasteció la cercana fábrica de San Mamés, en Busturia. Esta factoría se mantuvo en activa entre 1842 y 1862, dedicada a la fabricación de loza de estilo inglés y cerámica tipo Talavera.
Volviendo al camino vecinal, nos dirigimos al barrio de Goierria, que atravesándolo entre antiguos caseríos desembocaremos en el entorno del apeadero del tren, donde existen varios elementos de interés: unos rústicos embarcaderos de madera y junto a ellos, la antigua fábrica de tejas de Murueta de la que se mantiene su chimenea, ahora en restauración, y parte de la estructura.