sábado, 28 de agosto de 2010

Yacimientos de Atapuerca




En los últimos años los yacimientos de la Sierra de Atapuerca han cobrado especial interés y actualidad debido a los importantísimos hallazgos que se están produciendo, lo que está permitiendo dar a conocer a la comunidad científica internacional la gran trascendencia de este singular complejo arqueológico, que se ha convertido en referencia obligada para el estudio de la presencia y evolución humana en nuestro continente.
La Fundación Atapuerca, desde su constitución en julio de 1999, ha estado próxima a la labor de investigación y difusión realizada por el equipo de investigación que trabaja en Atapuerca.
Tiene por objeto facilitar continuidad y amplio respaldo organizativo y económico al programa de investigación que se está llevando a cabo en la Sierra de Atapuerca, así como difundir la producción cultural, mediante cauces que permitan captar ayudas y colaboraciones para conseguir la más eficaz interacción entre el equipo investigador y los agentes sociales, y contribuir a que los yacimientos de la Sierra de Atapuerca tengan la proyección científica y cultural que merecen como Patrimonio de la Humanidad.
La curiosidad por lo desconocido o lo misterioso es una característica inherente al ser humano que ha hecho que desde siempre nos atraigan aquellas zonas misteriosas a las que no tenemos acceso fácilmente. Esta ansia por explorar lo nuevo unido al propio deseo humano de dejar constancia de su paso por los sitios que visita, hace a Fray Manuel Ruiz entrar a Cueva Mayor en 1645 y grabar allí su nombre. De esta manera sabemos que esta cueva es conocida desde antiguo.
En 1868 ya hay un guía en esta cueva, D. Ramón Inclán. En 1910 Jesús Carballo descubre las pinturas del Portalón de la Cueva Mayor. En 1962 el Grupo Espeleológico Edelweiss de Burgos advierte de la existencia de fósiles en la Trinchera del Ferrocarril. En 1963 se recupera un bifaz al realizar un muestreo en la Trinchera. En 1964-66 Francisco Jordá realizará excavaciones en la Trinchera y en Cueva Mayor. En 1973 J. Mª Apellániz comienza su estudio en la Galería del Sílex y en Cueva Mayor. En 1976 el ingeniero de minas, Trino Torres desciende a la Sima de los Huesos en busca de restos de osos, Ursus deningeri, y recupera junto a restos de éstos, varias piezas dentarias, craneales y tres mandíbulas humanas que confía al paleontólogo Emiliano Aguirre.
Aquí comienza la gran historia de estos yacimientos, gracias a la inquietud por el conocimiento de Emiliano, quien después de la enorme impresión que le produce esta sierra cuando la visita por primera vez, elabora un proyecto de investigación y pide el pertinente permiso de excavación. Era en 1978.
En ese año se elaboró un proyecto de investigación dando comienzo a las primeras excavaciones en los yacimientos de esta sierra burgalesa. Emiliano Aguirre estuvo al frente de las excavaciones hasta el año 1991, año en el que se jubiló y dejó la dirección del Proyecto de Investigación de Atapuerca a Juan Luis Arsuaga, José María Bermúdez de Castro y Eudald Carbonell. Los tres codirectores crearon un equipo de excavación multidisciplinar, el cual obtuvo el Premio Príncipe de Asturias de Investigación Científica y Técnica en el 1997.
Después de 30 años de trabajos e investigaciones continuadas el Equipo de Investigación Atapuerca sigue trabajando en este importantísimo Proyecto intentando conocer un poco más cómo éramos y quiénes somos. En cada campaña de excavación se concentran más de 150 especialistas en muy diversas disciplinas pertenecientes a diferentes universidades y centros de investigación.
Para visitar los yacimientos, partiendo de Burgos, se toma dirección Vitoria y después dirección Logroño hacia Ibeas de Juarros y Zalduendo. Aquí se coge el desvío a San Juan de Ortega en la carretera hacia Agés y Atapuerca. En el centro de visitantes de Atapuerca hay un autobús que lleva a la gente hasta los yacimientos.
Las visitas guiadas a los yacimientos de la Sierra de Atapuerca se pueden hacer tanto a nivel individual como en grupos.

viernes, 27 de agosto de 2010

Museo de la Evolución Humana




El pasado 13 de julio se inauguró el Museo de la Evolución Humana (MEH) en Burgos. Es un museo que está dedicado a contar la historia de nuestra especie y a la importancia de los yacimientos de Atapuerca.
Aquí se muestran los fósiles originales de los restos humanos de Atapuerca, Homo antecesor y Homo heidelbergensis. Además cuenta con la reconstrucción del buque Beagle, (que llevó a Darwin -autor de El origen de las especies-), de sensacionales reconstrucciones escultóricas y de grandes espacios interiores para disfrutar de proyecciones y descubrimientos científicos.
El Museo consta de planta baja en la que se ofrece una idea general de la Sierra de Atapuerca y su ecosistema. En la planta 0 podemos ver la evolución en términos biológicos. Darwin y Ramón y Cajal ocupan un espacio propio. En la planta 1 se explica el papel de las herramientas, del fuego, del lenguaje, del arte en la prehistoria. La planta superior muestra los ecosistemas que más influyeron en el desarrollo humano.
El Museo se ubica en el centro de Burgos, en un edificio de nueva planta, obra del arquitecto Juan Navarro Baldeweg.
El Museo, sin embargo, no sustituye a la experiencia de conocer los yacimientos de la Sierra de Atapuerca, sino que la complementa. Sobre los parajes que la conforman han paseado, comido, dormido, recolectado y cazado grupos de antecessor, heidelbergensis, neandertales y sapiens. Compartiendo sabinares, bosques de robles, encinas, castaños, abedules, hayas, pinos y zonas de ribera, han habitado caballos, rinocerontes, bisontes, gamos, jabalíes, ciervos, osos, tigres, linces, leones...
Es posible sacar una entrada combinada de Museo, Parque Arqueológico y Yacimientos.

domingo, 15 de agosto de 2010

Isla de Izaro




La isla de Izaro está situada en la costa vizcaina, frente a las localidades de Bermeo y Mundaka. La isla ocupa el centro de la desembocadura de la ría de Mundaca, y se encuentra flanqueada por los cabos de Ogoño y Matxitxako. Forma parte de una misma unidad geológica con la punta de Anzoras, en la margen derecha de la ría. Está comprendida en el área natural de Urdaibai.



La isla es alargada, de forma triangular, y está orientada en dirección NO-SE. La punta noroeste es denominada "Artxikote". Hacia el noreste de la isla, y separado de ésta unos 200 m, existe una roca llamada "Potorro-harri" o "Harri-ederra". Al sudeste se encuentra un embarcadero natural o "puerto" de Izaro.



En la explanada superior se erigió un convento franciscano que, parece ser, fue arrasado por el pirata Sir Francis Drake en el siglo XVI. Abandonaron el convento, pero aún quedan algunos vestigios. Según cuenta la leyenda, que recoge el historiador bermeano A. Erkoreka, uno de los frailes del convento se entendía con una chica de Anzora, entre Laida y Laga. Iba cada noche a verla, para lo que la joven encendía una luz en la ventana de su casa. De este modo, el fraile, guiado por la luz, pasaba a nado de un lado a otro. Cuando ya había estado con ella, volvía al convento nadando. Con el tiempo, la familia de la chica se dio cuenta de esas relaciones, no viéndolas con buenos ojos. Una vez, un día en que hacía mal tiempo y que el fraile se dirigía a donde la joven, los familiares, viéndole venir, retiraron la luz que había puesto la joven. El fraile, desorientado, sin saber hacia dónde dirigirse, se perdió y se ahogó.



La isla acostumbraba recibir visitas de jóvenes de acampada, hasta que el patronato de la Reserva de la Biosfera de Urdaibai, de la que forma parte, prohibió tal actividad.



Izaro es una verdadera colonia de aves marinas, siendo la especie más común la gaviota argenta, aunque también anidan la gaviota sombría, las garcetas y los cormoranes. En épocas anteriores se criaban en ella conejos (seguramente llevados por los frailes del convento), y en el siglo XIX se arrendaba la isla para que pastaran las ovejas.



Sus costas y alrededores son zonas de buceo y pesca viéndose en verano gran cantidad de pequeñas embarcaciones de pesca deportiva con puerto en Mundaka, Sukarrieta o Bermeo.


La festividad de la Magdalena



Sobre su titularidad es célebre la disputa mantenida entre la villa de Bermeo y la anteiglesia de Mundaka. Ambas localidades han mantenido a lo largo de la historia varios enfrentamientos acerca de sus límites territoriales con el transfondo de su distinto rango, así defendía la anteiglesia de Mundaca sus derechos sobre la tierra llana sobre la que Bermeo tenía pretensiones. Estas disputas llegaron incluso a las Juntas Generales de Gernika que consideró necesario nombrar una comisión para el establecimiento de los límites, pero ni así se arreglaron completamente las disputas. De aquellos problemas quedan pruebas en la pertenencia de la aldea de Demiku a Bermeo y la adscripción de su iglesia a la parroquia de Mundaka.
Quizá de todas aquellas disputas surgiera la leyenda de la regata de Izaro, de la que aún mantienen algunos autores reservas sobre su verdadera realización. Cuenta ésta que para dilucidar la propiedad de la isla, decidieron mundaqueses y bermeanos disputar una regata bajo el arbitraje de Elantxobe, ya que ésta última localidad que también reclamaba la isla, al parecer cedió finalmente a sus pretensiones.
Se acordó que la regata daría comienzo al amanecer. Se celebró y los remeros de la trainera de Bermeo salieron victoriosos a pesar de perder a uno de sus hombres que cayó al mar y pereció ahogado. La tradición mundaquesa cuenta, sin embargo, que los bermeanos encendieron hogueras para que el gallo cantara antes, lo que les dio la ventaja necesaria para ganar la regata.
La regata se conmemora actualmente el 22 de julio, día de Santa María Magdalena, con una fiesta de hermanamiento entre Mundaka, Bermeo y Elantxobe. En el acto principal de la fiesta, el alcalde de Bermeo que lo será ese día también de Elantxobe y Mundaka, en presencia de los alcaldes de Mundaka y Elantxobe, lanza una teja al mar junto a la costa de Izaro diciendo Honaino heltzen dira Bermeoko Itxuginak (hasta aquí llegan las goteras de Bermeo), fórmula mediante la cual se renueva anualmente la posesión bermeana de la isla de Izaro, y se asciende a ella para colocar dos ikurriñas, la de Euskadi y la Bermeo, siendo casi el único día del año que la isla recibe visita.

lunes, 9 de agosto de 2010

Monasterio de Sandoval




El Monasterio de Santa María de Villaverde de Sandoval se encuentra en la provincia de León y fue fundado por donación de Alfonso VII en 1171.
Este Monasterio de monjes del Císter sufrió el abandono total después de la desamortización de Mendizábal. Actualmente es templo parroquial y los primeros domingos de los meses de mayo a octubre cantan en latín los feligreses durante los oficios.
El conde Ponce de Minerva y su esposa doña Estefanía Ramírez fundaron el Monasterio de Sandoval en el año 1167. En un primer momento, vinieron a poblarlo monjes del monasterio de San Pedro de la Espina (Valladolid). Sandoval recibió a lo largo del tiempo numerosas e importantes donaciones de la realeza y de los nobles de la zona. Algunos de ellos, igual que los fundadores, recibieron entierro en su iglesia.
Durante los siglos XIV y XV padece una importante decadencia, de la que logrará salir a partir de 1487 con su ingreso en la Congregación Cisterciense de Castilla. Por lo que respecta a su situación cerca del Camino de Compostela, el Monasterio contaba con un hospital de peregrinos y según la documentación del monasterio, se hace referencia a unas limosnas que dio el abad «a unos religiosos que iban a Santiago» en 1594.
Se conservan otros documentos, en los que se anotan donativos hechos a monjes y clérigos y, aunque no especifican que se trata de peregrinos, la noticia reseñada arriba sin duda no debió de ser un caso aislado. Desamortizado en 1835, como tantos otros, en la actualidad se está llevando a cabo la restauración del conjunto monástico.
La iglesia presenta planta de cruz latina con tres naves, transepto destacado y cabecera formada por tres ábsides semicirculares precedidos de tramo recto. Éstos se cubren con bóveda de cañón (igual que en los extremos del transepto), mientras que los hemiciclos lo hacen con bóveda de horno (con nervios de refuerzo) y el resto del templo con crucería (en el caso del crucero, octopartita).
Comenzada durante la segunda mitad del siglo XII, no se concluyó hasta 1462, según una inscripción en la que se indica que el abad Pedro de la Vega terminó el templo. En su interior se conservan interesantes sepulcros góticos, un capitel del siglo X, que hace las funciones de pila de agua bendita, y varios retablos de época moderna. El claustro, renovado en el siglo XVII, se dispone al sur. De las dependencias medievales quedan los vanos que daban acceso a la sacristía y a la sala capitular, y parte de la sala de monjes.
El Monasterio se puede visitar. La señora Munda era la guía, pero ahora está su hija, Salud, y su nieto Julián. Para contactar, llamad al teléfono 987 31 00 64.

Leh 12

Termina la estancia en Leh en la región de Ladakh, en el pequeño Tíbet de la India, con la visita al Monasterio de Matho que pertenece a la ...