El espejo invertido

El Museo Guggenheim Bilbao acoge la exposición El espejo invertido con obras de 52 artistas procedentes de los fondos de dos de las colecciones de arte contemporáneo más importantes de Europa: la de la Fundación "la Caixa" y la del MACBA, que por primera vez se presentan de manera conjunta fuera de sus respectivas sedes.

Este recorrido desde finales de los años cuarenta hasta el momento actual incluye pintura, escultura, fotografía y vídeo, y está organizado en seis secciones temáticas: "Dau Al Set y El Paso", "Función y recreación en la fotografía: Landschaft", "Función y recreación en la fotografía: el Yo y el Otro", "Los Límites de la performance", "El espejo invertido" y "Levedad, gravedad y otras imposibilidades".


Desde los grupos de posguerra Dau al Set (1948-54) y El Paso (1957-60) hasta las escuelas de fotografía de Vancouver y de Düsseldorf, los artistas y corrientes seleccionados constituyen importantes puntos de inflexión en el desarrollo del arte contemporáneo, según los organizadores de la muestra.

Estos momentos históricos reflejan las áreas que con mayor profundidad se representan en ambas colecciones y, entre otros temas, muestran el inicio del Informalismo en España, a través de las obras de Rafael Canogar, Antonio Saura y Antoni Tàpies, y los diversos modos de tratar la objetividad desarrollados por la fotografía contemporánea, mediante las obras de Andreas Gursky, por ejemplo. Además, se incluyen obras de artistas como Gego, Julian Schnabel, Michelangelo Pistoletto, Sigmar Polke y Martha Rosler, entre muchos otros.

Como se recoge en la información facilitada por el Museo Guggenheim, el título de la exposición deriva de la obra de Michelangelo Pistoletto Arquitectura del espejo (Architettura dello Specchio, 1990), incluida en la exposición. El espejo sirve como metáfora de los procesos que entraña el nacimiento de una colección de arte, pues permite establecer nuevas conexiones entre un objeto y su entorno, reuniendo en una única imagen elementos distintos.

La exposición permanecerá hasta el 2 de septiembre en la pinacoteca bilbaina.

Fotografías: Museo Guggenheim Bilbao