La campiña atlántica es uno de los elementos destacables del paisaje de Busturia. El caserío y su entorno más cercano (pastos, prados de siega, cultivos...) son sus protagonistas.
Otra actividad tradicional en esta zona fue la cal. Este producto supuso en el pasado un elemento fundamental en el medio rural. Sus aplicaciones eran muy diversas: el blanqueo de las paredes de los caseríos, el abonado de los campos, la cura de las heridas del ganado, la desinfección de la cuadras o la conservación de los huevos frescos. Cercano al caserío Larrago se encuentra una de las mejor conservadas.
A poca distancia de los caseríos Larrago y Eperrene se encuentra la campa de Eperlanda, donde según la tradición oral se celebraban reuniones paganas o akelarres.
Petralanda, Sorgintoki... son algunos nombres que en esta comarca se asignan a los lugares donde vecinos y supuestas brujas se reunían alrededor de un macho cabrío conocido como Akerbeltz. La inquisición quiso ver demonios y brujas donde sólo había vecinos unidos en torno a viejas creencias.
Otra actividad tradicional en esta zona fue la cal. Este producto supuso en el pasado un elemento fundamental en el medio rural. Sus aplicaciones eran muy diversas: el blanqueo de las paredes de los caseríos, el abonado de los campos, la cura de las heridas del ganado, la desinfección de la cuadras o la conservación de los huevos frescos. Cercano al caserío Larrago se encuentra una de las mejor conservadas.
A poca distancia de los caseríos Larrago y Eperrene se encuentra la campa de Eperlanda, donde según la tradición oral se celebraban reuniones paganas o akelarres.
Petralanda, Sorgintoki... son algunos nombres que en esta comarca se asignan a los lugares donde vecinos y supuestas brujas se reunían alrededor de un macho cabrío conocido como Akerbeltz. La inquisición quiso ver demonios y brujas donde sólo había vecinos unidos en torno a viejas creencias.
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