miércoles, 10 de marzo de 2010

Presentación del número de la revista Zurgai dedicado a Ángela Figuera


Esta tarde se ha presentado el número de la revista Zurgai dedicado a Ángela Figuera Aymerich en la Biblioteca de Bidebarrieta. Han intervenido Pablo González de Langarika, director de la revista Zurgai, José Ramón Zabala, escritor y ensayista, Rafael Redondo, escritor y maestro Zen y la rapsoda Carmen Bereciartua.
Durante toda la sesión se han proyectado las imágenes digitales de Koldo Etxebarria que ha sido el ilustrador del número.
José Ramón Zabala ha hecho un resumen de la figura de la poetisa bilbaina (Bilbao, 1902, Madrid, 1984). Junto con Blas de Otero y Gabriel Celaya, formó parte del importante Triunvirato Vasco de la poesía de post-guerra.
Combinó en sus textos su condición de mujer con su condición de ciudadana que pide justicia social. Según el ensayista Zabala, practica una poesía social de corte existencialista solidario.
Proveniente de una familia de bajos recursos, por encima de impedimentos familiares y sociales, en 1932 logró finalizar sus estudios de Filosofía y Letras. Ese mismo año se casa con Julio Figuera. Se trasladan a vivir a Madrid porque Ángela se presenta a la Cátedra de Literatura en Institutos.
En 1935 da a luz a un niño que muere al poco tiempo de nacer (maternidad y ternura son constantes temáticas en su obra). Al desatarse la guerra, su esposo se alista en las milicias republicanas y Ángela, embarazada nuevamente, permanece en Madrid, donde nace su hijo Juan Ramón.
Más tarde se traslada a Soria, donde logra escribir con cierta tranquilidad. En 1948 aparece su primer poemario Mujer de barro, editado en 1948 en Méjico fue su primer libro, a éste sigue Soria pura (1949). Se trata de dos obras intimistas en las que se refleja la mujer que vuelve a ser feliz tras tanta muerte y desastre, la persona realizada en el ámbito familiar y en el amor, aunque ambos libros en aquel momento, fueron censurados por "exceso de sensualidad", siguió su carrera literaria.
Sus libros siguientes se incluyen dentro de la tendencia de la poesía social, entre éstos, destacan: Vencida por el ángel (1950), El grito inútil (1952), Víspera de la vida (1953), Los días duros (1953), Belleza cruel (1958), aparecido en México con prólogo de León Felipe, y, finalmente, Toco la tierra. Letanías (1962). Sus últimos textos los dedica a los niños, en especial a sus nietos: Cuentos tontos para niños listos (1979) y Canciones para todo el año (1984). Murió a los 82 años en Madrid.
En el último ejemplar de la revista Zurgai dedicado monográficamente a Ángela Figuera se reivindica su figura como una mujer de izquierdas y progresista, que siempre iba por delante de su tiempo.
El Ayuntamiento de Bilbao le ha dedicado una calle barrio de Miribilla.

No hay comentarios:

Nueva Zelanda. Isla Sur (11)

Antes de ir al aeropuerto de Christchurch, donde finalizamos este fantástico viaje por Nueva Zelanda, nos dirigimos a Akaroa. El puerto de A...