Hoy el día ha amanecido con sol y tenemos la posibilidad de ver despejado el legendario volcán Taranaki en las llanuras que circundan New Plymouth, así que continuamos con el “road trip” por este maravilloso país.
El volcán, de 2.518 m, tiene el aspecto clásico y por su parecido con el monte Fuji, Taranaki sirvió de escenario a Tom Cruise, para filmar la película “El último Samurai”.
Al llegar al centro de visitantes del Egmont/Taranaki National Park tomamos una de las rutas para hacer senderismo por los alrededores. Los árboles del bosque y la frondosa vegetación nos envuelven en un ambiente natural extraordinario.
Taranaki es uno de esos lugares maoríes sagrados, muy importantes en su cultura. Aquí, según cuenta la leyenda, el monte Taranaki convivía junto a los montes de Tongariro, Ngauruhoe y Ruapehu en un lejano pasado. No obstante, tras una guerra entre ellos, terminó por mudarse a un nuevo emplazamiento, el que hoy ocupa y al que acuden montañeros a sus laderas y surfistas buscando las olas de sus costas.
Después nos dirigimos al Lago Mangamahoe, que además de haber zonas de descanso y picnic, con bandadas de patos, cisnes negros y gansos tiene una preciosa panorámica del volcán. Hay un mirador, de fácil acceso, donde se puede tomar una buena foto del Taranaki.
Para salir de New Plymouth tomamos la Surf Highway 45, carretera costera que rodea el Mt. Taranaki y con buenas localizaciones para surfistas. Paramos a comer unas deliciosas hamburguesas en el “Serial Griller”, una hamburguesería ubicada en un antiguo vagón de tren.
Por tarde, llegamos hasta Cape Egmont Lighthouse, tomando la carretera local hacia Pungarehu, para ver desde otro punto de vista el volcán.
Al finalizar el día fuimos a ver la puesta de sol en la playa de Waverley Beach, que además cuenta con unos bonitos farallones.
Noche en Wellington, la mayor ciudad de la costa oeste de la Isla Norte, con una importante economía local gracias al petróleo, el gas natural y los productos lácteos.
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